Se puede leer en The Register que un spammer ha sido condenado a 30 meses de cárcel y a pagar $180.000 a AOL debido al envío de 1’2 millones de mensajes basura a sus clientes.
Adam Vitale, que así se llama el afortunado joven de 27 años de Brooklyn, se dedicó a hacer spam de un producto de seguridad informática. Parece que él, junto a un tal Todd Moeller, procedieron al envío de estos mensajes a través de proxies anónimos (seguramente PCs infectados), falsificando además las cabeceras necesarias.
Tendrá que pasar 65 segundos en la cárcel por cada uno de los mensajes que envió.
1’2 millones de mensajes son bastantes, pero parece un «cabeza de turco» para hacer demostrar que se está haciendo algo contra los spammers.
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